Construido en 1985 por los astilleros IRWIN YACHT en Estados Unidos, el PROS llamaba su atención por la elegante estética, con sus dos palos y casco rojo. La construcción del modelo 68, del astillero americano, contaba con más de 20 metros de eslora y más de 5 metros de manga. Lo que le confería casi 65 toneladas de arqueo bruto. Estas dimensiones y su gran peso (más de 40 toneladas según la Hoja de asiento) hacían que el barco fuera muy estable en navegación y confortable para las 12 personas que la nave podía albergar. Sin embargo, no fueron suficientes para soportar los embates del mar generados por un tifón tropical cerca de la isla de Guam. Allí el barco ha pasado a ser un pecio que ahora descansa sobre el fondo, dando por concluidas sus singladuras en un último y honorable viaje. Pues el PROS, matriculado en Palma de Mallorca, estaba reproduciendo la gesta de Magallanes y Elcano cuando sucumbió a la meteorología. De este modo, reprodujo tanto la hazaña de la circunnavegación del globo que se ha hundido algunos cientos de millas antes de arribar a la isla de Mactán, donde murió el impulsor de la expedición primigenia, Fernando de Magallanes.
El último viaje del PROS se inició en 2019
En los albores de la fatídica pandemia que golpeó al mundo hace unos años, el PROS salió de Sevilla con el propósito de su tripulación de reproducir la gesta de la circunnavegación de Juan Sebastián Elcano. Tras cuatro años tras la derrota del marino vasco, era el propio capitán del navío el que comunicaba tan lamentable pérdida. A pesar de que, afortunadamente, la tripulación se había refugiado en tierra, el barco no pudo aguantar la fuerza del tifón. Según medios de comunicación locales, con vientos sostenidos por encima de los 200 kilómetros por hora. Lo que hizo que el barco se sumará a los múltiples destrozos ocasionados en la isla del pacífico, en la que el mar no hizo honor a su nombre.
Tras la tragedia, los propios servicios de guardacostas de la Isla de Guam han iniciado las labores de identificación del pecio. Según informaciones publicadas el barco podría encontrarse a unos 25 o 30 metros de profundidad. Es lo que se desprende de las pasadas con la eco sonda CHIRP que utilizan los guardacostas. Si bien, no puede determinar si realmente los restos localizados se corresponden con los del barco siniestrado. Según las mismas fuentes, el barco habría desarbolado completamente, e incluso se podría encontrar zozobrado sobre el fondo. Es al menos la hipótesis que se baraja al no poderse detectar los dos mástiles que debería tener sobre cubierta.
Desde aquí nuestro apoyo a la tripulación y armador y nuestro pesar por la pérdida de tan fabuloso barco.